Desde
muy chiquitito, Edu era un mono al que le gustaba mucho saltar , hacer pequeños espectáculos de saltos y piruetas en el aire para entretener a sus amigos de la selva.
Todos lo
querían mucho, ya que siempre quería verlos contentos y con sus saltos y
volteretas lo conseguía, y por ello siempre
recibía los aplausos del resto de animales.
Un día,
un señor del circo paseaba por la selva y se encontró con el número especial de
saltos de Edu. Se escondió detrás de unos árboles para observarlo sin asustarlos, cuando el fabuloso espectáculo terminó y los
animales comenzaron a aplaudir, el hombre salió de detrás de los árboles y
también comenzó a aplaudir.
Al
principio, los animales se asustaron por la presencia de un humano entre ellos,
pero él les aseguró que no les haría nada, que solo estaba paseando cuando se
había encontrado con ese fantástico festival de saltos.
A Edu la
idea le encantó, pero le daba un poco de miedo ya que nunca había salido de la
selva. Sus amigos los animales lo animaron, le dijeron que así podría hacer
feliz a mucha más gente y eso lo ayudó a convencerse, cogió sus cosas y se fue
con el señor del circo.
Y desde
entonces Edu fue un mono mucho más feliz, en el circo le enseñaron muchos más saltos y piruetas, por lo que aprendía
algo que le gustaba de verdad mientras recibía los aplausos de toda esa gente
que iba a verlo.
A el mono Edu, le encanta que le den color y coloreen sus plátanos verdes y amarillos, ¿Quieres darle color?
No hay comentarios:
Publicar un comentario